Evolución y cambio de paradigma con inteligencia emocional
Nos encontramos, dentro de un paradigma determinado (sistema económico y de intercambio), y dentro de una estructura piramidal obsoleta.
La evolución es imperceptible en nuestro día a día, necesitaríamos tomar perspectiva en el tiempo para ser conscientes de ello si lo hacemos de otra manera tenemos sensación de inmutabilidad.
Nuestras creencias (totalmente limitadoras) y las barreras de vivir en un determinado paradigma (sin ser conscientes de ello), nos impone reglas que determinan constantemente nuestra visión de la realidad.
Deberíamos convencernos que nos falta desarrollar plenamente nuestra inteligencia emocional para intentar salir como mínimo del condicionamiento que nos lleva a seguir moviendonos entre dos axiomas que han y siguen marcando nuestra evolución hasta la fecha.
Continuamos encajados en el temor hacia todo lo nuevo, por tradición todo lo nuevo lo sentimos como un "descontrol, caos" e incluso como la fuente de todo mal.
Nos regimos ante emociones de creencia que nos cuesta romper. De este modo actuamos sin darnos cuenta de una manera automática, que nos impide plantearnos nuevas formas de interacción e intercambio mas allá de lo que nos es costumbre y estamos habituados y no solo nos impide el plantearnoslo sino que normalmente nos lleva en ocasiones al rechazo.
En muchas ocasiones rechazamos y negamos iniciativas que "atenten contra el orden establecido", por considerarlas utópicas, imposibles o generadoras potenciales de todo tipo de males.
Anclados en el paradigma interiorizado y establecido en nuestra actual sociedad, plantearnos un cambio nos resulta como un gran salto al vacio que atenta contra todo lo conocido y nos puede llevar al desastre.
Nuestro bajo desarrollo emocional en muchas ocasiones, tanto como seres individuales o como sociedades nos lleva a actuar bajo la creencia de que siempre ha sido así por lo tanto es casi imposible que sea diferente.
Quizá sea el momento de cultivar y desarrollar nuestra inteligencia emocional parandonos a pensar que tal vez todo sea tal y como es porque no hemos llegado al punto evolutivo de desarrollo de todas nuestras capacidades y que todo pase a ser diferente.
Abrirnos a un nuevo paradigma social y económico quizás sea tomar conciencia real de que somos seres en continua evolución y que las limitaciones que nos imponemos son consecuencia del paradigma social y económico que o bien nos ha tocado vivir o bien hemos construido, por todo ello hemos de seguir trabajando en el desarrollo de nuestra inteligencia emocional, para lograr cambiar el paradigma que conocemos.
Deberíamos empezar desarrollando el diálogo colectivo para aprovechar todo el potencial de diversidad, inteligencia colectiva y la coinnovación y cocreación para poder vencer el vértigo (temor) que conllevan todos los cambios.
Todo esto es posible si colectivamente maduramos y desarrollamos nuestra inteligencia emocional.
Desarrollemos nuestra inteligencia emocional, desarrollemos la creatividad que va de la mano de la inteligencia emocional, saltando a la innovación aunque esta requiera de fracasos, aunque los fracasos en nuestra sociedad no estén bien vistos, dejemos de sentir "MIEDO" el miedo bloquea la creatividad, el cambio y la innovación.