Facioterapia o multirreflexología Dien Chan
La facioterapia o Multirreflexología Dien Chan es una terapia de procedencia vietnamita de poco más de 30 años de historia, por lo que es muy nueva y actual.
Esta nueva reflexología ha sido desarrollada por el profesor-doctor Bùi Quôc Châu desde principios de los años 80. Está basada en la cultura, la filosofía, el folklore y la lengua vietnamita, además de en la medicina oriental y la acupuntura.
El Dr Châu se inspiró en el esquema del feto invertido de la auriculoterapia para investigar las relaciones existentes entre el rostro y el cuerpo, y desarrolló su trabajo un centro de toxicómanos en Saigón, donde cada día llegaba a tratar a miles de pacientes.
¿Qué es la multirreflexología Dien Chan?
Esta terapia se llama multirreflexología por que se basa en múltiples esquemas de reflexión sobrepuestos en la cara. Además, también se han encontrado relaciones de reflexión entre puntos opuestos en el cuerpo, la zona del cráneo y en las extremidades. Por poner un ejemplo: un problema de cervicales puede ser tratado a nivel local – sobre las cervicales – y a nivel reflejo sobre el rostro, o bien sobre la extremidad, en particular sobre la muñeca, que es la parte representativa corporal de la zona de las cervicales.
¿Cómo se aplica?
La facioterapia es una técnica perfecta para la autoaplicación o el autotratamiento, para poder complementar el tratamiento que se este siguiendo con el terapeuta habitual.
Para tratar las zonas de reflexión y puntos reflejos solo es necesario un estimulador de puntos o bien un simple bolígrafo con forma redonda, si bien también se puede hacer con los dedos. Cada zona o punto se estimula durante unos pocos segundos, por lo que es una terapia fácil y de rápida ejecución.
Muchos terapeutas la integramos como parte de la terapia principal realizada en consulta, como por ejemplo, el quiromasaje, el drenaje, la reflexología podal, la terapia con ventosas etc.
¿Qué puedo tratar con la facioterapia Dien Chan?
La facioterapia es útil en múltiples patologías o disfunciones que impliquen cualquier parte del cuerpo: problemas cutáneos, alergias, cansancio, problemas gástricos, adicciones, obesidad, retención de líquidos, celulitis, problemas cardíacos, artritis, artrosis, problemas respiratorios, contracturas, calambres, problemas renales, biliares o hepáticos, dolor de cabeza y de espalda, cervicalgias, lumbalgias, migrañas, ciática, etc. Además, es perfecto para estimular el sistema inmunitario, la producción natural de antiinflamatorios, para desintoxicar el organismo, para ayudar con el estrés… y muchos más.