Reiki, ¿qué reiki?
En la actualidad se están enseñando diversos tipos de Reiki (Usui, Tibetano, Egipcio, Karuna, y otros de reciente creación…). Y a la hora de aprenderlo, los alumnos no saben cuál es el mejor para su crecimiento personal, cuál les va a ayudar más…
Pues bien, ¡es puro marketing!. Porque hace unos 10-15 años sólo había un par de “Reikis” y poquitos maestros. Ahora, con el boom de la “new age”, somos miles de Maestros, y algunos se quieren diferenciar del resto para atraer alumnos y decir que han descubierto o creado un Reiki cuya energía es más sanadora y potente que la del resto.
Es como si Unión Fenosa dijera que “su energía eléctrica” es mejor que la de Iberdrola…
El Reiki original, el que practicaba y enseñaba Mikao Usui, era el Reiki muy básico, ya que él se limitaba a sanar a las personas por imposición de manos, aplicando los símbolos ¡y punto!…
Luego la técnica se ha perfeccionado y se han introducido más técnicas, pero a la hora de analizarlas, siempre es más de lo mismo y el denominador común de todas ellas es liberarnos de los bloqueos energéticos que se nos han ido produciendo a lo largo de los años debido a las emociones mal gestionadas (exceso de preocupación, miedos, enfados, apegos…)
Pero el nombre es lo de menos. En lo que nos tenemos que centrar es en los infinitos beneficios del Reiki y en su verdadera esencia, alcanzar la paz interior y la felicidad pase lo que pase, estemos en la situación en la que estemos ¡lo más que un ser humano puede alcanzar!
Y que sepáis que el Reiki es una técnica muy fácil de aprender y que todos vosotros podéis aprender e incluso llegar a ser Maestros; que no es algo que sólo unos elegidos han podido aprender.
Y, ¿os podéis creer que mientras escribo este artículo me llaman para decirme que si estoy interesada en hacer otra maestría con un “gurú” que se van a traer de Méjico y que hace un Reiki que es “primicia en España”? ¡pero qué primicia!; ¡Si la energía es la misma se llame como se llame el Reiki!