Cuando el pensador cambia, todo cambia

18 Dic 2018 lectura de 6 minutos
Cuando el pensador cambia, todo cambia

Hay miles de leyes que rigen nuestra existencia seamos conscientes de ellas o no. Este es el caso de la Ley de la Gravedad, la de la inercia, la Ley de Newton o principio fundamental de la dinámica, la del electromagnetismo, la nuclear y unas cuantas más. Todas ellas son bien conocidas por la física y están actuando en todo momento. Condicionan nuestra vida aunque no seamos conscientes de ellas o no sepamos de su existencia.

Sin embargo, hay otros principios que la física no contempla y que la mayoría desconoce. Este es el caso de los principios herméticos enunciados por Hermes Trimegisto, considerado el padre de la sabiduría del antiguo Egipto antes de la Era Cristiana. Todas sus enseñanzas permanecieron ocultas. Sólo unos pocos pudieron disfrutar de su sabiduría de forma oral. Fueron más tarde 3 discípulos suyos los que recopilaron toda la información en un libro llamado "El Kybalión". En él encontramos un conjunto de axiomas que rigen y condicionan nuestra realidad. Estos son:

  • El Principio del Mentalismo.
  • El Principio de Correspondencia.
  • El Principio del Ritmo.
  • El Principio de Polaridad.
  • El Principio de Vibración.
  • El Principio de Causa y Efecto.
  • El Principio de Género.

Principio del mentalismo

El Principio de Mentalismo textualmente dice:

El todo es mente; el Universo es mental.

Según éste, nuestra realidad está condicionada por lo que pensamos a cada momento. Son nuestros pensamientos los que crean y generan nuestras experiencias. De hecho es en este principio en el que se basa la Ley de la Atracción cuando nos enseña a atraer a nuestras vidas aquello que deseamos. La clave está en si lo que pensamos es lo realmente deseamos y en los sentimientos que generan dichos pensamientos.

Comprender este principio nos permite tomar la batuta de nuestras vidas y crear lo que realmente deseamos para nosotros. Pero claro, no siempre es fácil. Si tomamos las riendas de todo lo que nos acontece, no podremos culpar a los demás de nada de lo que nos suceda. Tendremos que responsabilizarnos de todo.

Principio de correspondencia

Después está el Principio de Correspondencia el cual afirma que:

Como es arriba, es abajo; como es abajo es arriba.

Si consideramos "arriba" a nuestra mente y "abajo" al cuerpo, nos es muy fácil entender este principio. Si nos ponemos a pensar en algo negativo, nuestro cuerpo se contraerá y tensionará. Tanto es así, que la mayoría de las dolencias físicas que padecemos, tienen un origen mental emocional. Nuestra mente es la que ha generado ese desarreglo de nuestro cuerpo.

Y es más, lo mismo podríamos decir con "dentro" y "fuera" diciendo "como es adentro es afuera" ¿Por qué? Porque nuestra realidad está generada y creada por nuestros pensamientos. Si yo voy pensando que me van a atracar, las posibilidades de que aparezca un atracador y me saque una navaja es del 100%.

Principio de vibración

También está el Principio de Vibración el cual señala que:

Vibraciones iguales, vibran juntas.

Y en realidad es así. ¿No te ha pasado alguna vez que has visto a alguien y te ha dado "malas vibraciones"? Esto es simplemente porque vuestras vibraciones eran diferentes, vibrabais en diferente onda. Y lo mismo a la inversa. Seguro que alguna vez te han presentado a alguien y sin conocerla de nada era como si ya os conocieseis de toda la vida y vuestra amistad fuese eterna. ¿A qué sí? Pues en este caso era porque esta persona y tú estabais vibrando en la misma onda.

Este principio lo conocen muy bien los músicos. Es la razón por la cual antes de ponerse a tocar juntos, afinan sus instrumentos. Para todos vibrar en la misma onda.

Principio de polaridad

Muy relacionado con este principio está el Principio de Polaridad el cual defiende que:

Todo es doble; todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos.

Y nosotros consciente o no, lo usamos todos los días. Cuando hablamos de hombre o mujer, cuando, bueno o malo, alto o bajo, calor o frío. Vivimos el mundo de los opuestos.

En él, todo depende del "grado" ¿Dónde está el límite entre cerca y lejos? ¿Y el límite entre calor o frío? ¿Cuándo pasamos de un lado a otro? Según el "Kybalión" la clave está en salir de dichos opuestos y vivir en la "no dualidad". Salirnos de la dualidad para vivir en el TODO.

Principio del género

Pero claro, hay muchos opuestos. De hecho la humanidad vive en los opuestos cuando hablamos del género. El Principio del Género rige nuestra realidad. Sin hombres y sin mujeres, la raza humana se extinguiría. Somos la suma de los dos polos aunque luego al nacer pertenezcamos a uno de ellos. De ahí sacamos las cualidades femeninas y las masculinas y todo lo que asignamos y caracterizamos de cada uno de ellos.

Principio del ritmo

Tampoco podríamos olvidarnos del Principio del Ritmo dice textualmente:

Todo fluye y todo refluye; todo tiene sus periodos de avance y retroceso; todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento a la derecha es la misma que el movimientos hacia su izquierda; el ritmo es la compensación.

Si te fijas todo está regido por este principio de Ritmo: los días, las estaciones del año, nuestra respiración, el embarazo, la lectura de un libro... Comprender este principio nos permite planificar nuestras vidas y saber lo que viene después.

Principio de causa y efecto

Por último, está el principio de causa y efecto el cual dice:

Todo efecto tiene su causa y toda causa tiene su efecto.

Y así es. Muchas veces nos quejamos del efecto (de lo que estamos experimentando) pero no vamos a la causa. No vamos al porqué de lo que nos está pasando. Si mirásemos y buscásemos dónde está el origen, podríamos cambiar aquello que no nos gusta y generar la realidad que en verdad deseamos. Pero no, es mucho mejor culpar a los demás y no tomar las riendas de nuestras vidas.


Todo sucede de acuerdo con la ley.

Cuando una persona tiene un problema y éste le hace sufrir, es porque no cuenta con la información necesaria para superar dicho problema. Sólo cuando uno conoce los porqués y toma las acciones necesarias, puede resolverla.

El conocimiento de estos principios te da el poder para crear la realidad que tu deseas.