Hablemos de los cannabinoides

Susagna Muns Camp
29 Oct 2018 lectura de 5 minutos
Hablemos de los cannabinoides

El Cannabis Sativa se trata de una planta muy especial ya que, existen plantas femeninas y masculinas. Las femeninas son polinizadas por las masculinas, tras lo cual la planta masculina muere.

Las preparaciones medicinales se obtienen de las flores que han sido polinizadas. Debido a que la genética y los factores ambientales son los que determinan la expresión sexual de las semillas que germinan, este proceso ha sido clonado por las personas que se dedican a su cultivo con el fin de obtener plantas femeninas genéticamente iguales sin necesidad de que sus semillas deban ser polinizadas.

Para sus usos se utilizan tanto las raíces como las flores. Sus componentes son el cannabinoide (muchas veces se le denomina como fito-cannabinoide para poder diferenciarlo del endocannabinoide que produce el cuerpo humano).

Los 2 cannabinoides más conocidos son el delta-9-tetrahydrocanabinol o TBC (sustancia conocida por sus propiedades eufóricas) y el cannabidiol o CBD que no tiene psico efectos.

Existen unos 113 cannabinoides conocidos y unos 500 terpenos y flavonoides lo cual proporciona a cada cepa de cannabis distintas propiedades psicoactivas, efectos medicinales, olores, aromas y potenciales antioxidantes.

El uso del cannabis no se trata de una moda actual, existen referencias de su uso hace unos 11.000 años. Se han encontrado escritos médicos antiguos donde se detalla claramente el uso de esta planta. Por ejemplo, el libro de medicina The Canon of Medicine que fue un libro de texto utilizado en muchas universidades medievales. En diferentes capítulos de este libro se pueden leer referencias sobre las aplicaciones medicinales del cannabis.

En el año 1989 se descubrió el ECS, un sistema de análisis que se basa en lípidos que actualmente se sabe que es común en todos los mamíferos vertebrados. El ECS está compuesto por receptores de cannabinoides, ligandos endógenos y enzimas sintetizadoras y degradantes que construyen y descomponen los ligandos endógenos a demanda. Gracias a este descubrimiento, se ha ido investigando la relación entre el uso del cannabinoides CBD (no confundir con el TBC) y diversas patologías.

En el año 2004 algunos estudios llegaron a observar que enfermedades como la migraña, la Fibromialgia y el Síndrome del Intestino Irritable, la causa podría ser una deficiencia clínica de endocannabinoides (1).

En el caso de la Esclerosis Lateral Amiotrófica existe una desregulación de la respuesta inflamatoria y un desequilibrio del GABA en el desarrollo de esta enfermedad. En algunos modelos preclínicos se ha observado que los cannabinoides ejercen muchas de sus actividades al unirse a los receptores de cannabinoides e inhibir la liberación o las citoquinas proinflamatorias y las quimiocinas para suprimir la respuesta inflamatoria. Así como, una potencial para poder combatir los radicales libres (2)  (3).

En cuanto a la Esclerosis múltiple, los cannabinoides han demostrado tener unos resultados prometedores en cuanto a la reducción del daño y la espasticidad asociados a esta enfermedad. Cuando se administran cannabinoides en el diagnóstico temprano podría puede reducir la respuesta neuroinflamatoria en el córtex cerebral y puede frustrar la destrucción potencial de las células mielínicas (4)  (5).

La uveítis es una enfermedad inflamatoria ocular que produce edema y destrucción del tejido. Diversos resultados obtenidos en diferentes estudios sugieren que el uso de cannabinoides en la prevención de la uveítis asociada a enfermedades infecciosas y autoinmunes (6)  (7).

Existen numerosos estudios en los cuales se están investigando el uso del CBD en otras enfermedades como:

  • Alzheimer.
  • Parkinson.
  • Corea de Huntington
  • Infarto cerebral.
  • Esquizofrenia. Depresión. Ansiedad.
  • Epilepsia.
  • Glaucoma. Degeneración macular. Retinopatía diabética.
  • Enfermedades gastrointestinales: Reflujo Gastroesofágico. Úlcera gástrica. Enfermedad de Crohn. Cáncer de colon, páncreas y hepático. Cirrosis.
  • Enfermedades musculoesqueléticas: osteoarthritis. Artritis reumatoide. Cáncer óseo. Osteoporosis. Espasmos musculares.
  • Enfermedades pulmonares: asma. Cáncer de pulmón. Neumonía. Hipertensión pulmonar.

Esperemos que las investigaciones científicas vayan avanzando y si no es posible en algunos encontrar su cura, al menos, que las personas que sufren de estas graves enfermedades puedan optar a tener una calidad de vida que actualmente carecen de ella.


Bibliografía:

  1. SC, S. Ms, W. Clinical endocannabinoid deficiency revisited: can this concept explain the therapeutic benefits of cannabis in migraine, fibromyalgia, irritable bowel syndrome and other treatment-resistant conditions?. Neuroendocrinol. Lett. 35, 198 – 201 (2014)
  2. Zarei, S. et al. A comprehensive review of amyotrophic lateral sclerosis. Surg. Neurol. Int. 171 (2015).
  3. Giacoppo, S, Mazzon E. Can cannabinoids be a potential therapeutic tool in amyotrophic lateral sclerosis?. Neural Degener. Res. II, 1896 – 1899 (2006).
  4. Leussink, V et al. Symptomatic therapy in multiple sclerosis: the role of cannabinoids in treating spasticity. Ther. Adv. Neurol. Disord, 5, 255 – 266 (2012).
  5. Teare L, Zajicek J. The use of cannabinoids in multiple sclerosis. Expert Opin Investig Drugs 14, 859 – 869 (2005).
  6. Pertwee, RG. Targeting the endocannabinoid system with cannabinoid receptor agonist; pharmacological strategies and therapeutic possibilities. Philos. Trans. R. soc. Lond. B. Biol. Sci. 367, 3353 – 3363 (2012).
  7. Chen, J. simon, P. firi H. Abnormal Cannabidiols as Agent for Lowering Intraocular Pressure. 2, 1 – 13 (2013).