¿Negacionistas o bien informados?
El autoritarismo y nada democrático Gobierno de España y sus sicarios “los medios de comunicación” ponen toda la carne en el asador para denigrar, ofender, ridiculizar, difamar y otra serie de calificativos, a todos aquellos ciudadanos, grupos y asociaciones que tienen otra opinión diferente con respecto a las restricciones y violación de los derechos ciudadanos, apoyándose en el Coronavirus. Y para ello ha buscado la palabra clave “NEGACIONISTAS”.
Empecemos por la definición de “negacionistas”: “Actitud que consiste en la negación de hechos históricos recientes y muy graves que están generalmente aceptados” .
- En primer lugar, el coronavirus, no es un hecho histórico, es una mas de las pandemias habidas en el mundo.
- En segundo lugar, los hechos, no están generalmente aceptados.
Y sobre este segundo punto analizaremos la base de todo el problema. El propio circulo científico está dividido, incluida la OMS. Por tanto, los ciudadanos tenemos todo el derecho a poner en duda la opinión de un grupo de expertos desconocidos y posibles científicos pagados por el Gobierno y por consiguiente, su dictamen está supedito al político de turno.
Y vemos las opiniones de Médicos y Científicos independientes, que no solo, se oponen al confinamiento y al uso de mascarillas, también advierten de sus efectos nocivos para la Salud.
La Dra. Margarite Griesz-Brisson una especialista alemana en neurofisiología y neurotoxicología, que ha realizado unas declaraciones sobre los efectos de las mascarillas en el cerebro. Según la Dra. Griesz-Brisson, la re-inhalación del aire que respiramos nos lleva sin duda alguna, a una deficiencia de oxígeno y a la saturación de dióxido de carbono. Para el “grupo de expertos” del gobierno de España, informaré que nuestro cerebro es muy sensible a la falta de oxígeno. Por ejemplo células en el hipocampo, que no pueden estar sin oxígeno durante más de 3 minutos porque no sobreviven.
Cuando sufrimos una privación crónica de oxígeno, los síntomas que nos alertan de que algo no está funcionando bien como: dolores de cabeza, somnolencia, mareos, problemas de concentración y tiempo de reacción retardado, desaparecen a medida que nos vamos acostumbrando. Lamentablemente, su funcionamiento sigue siendo deficiente y la falta de oxígeno del cerebro continúa progresando.
Nos obligan a llevar y acostumbrarnos a llevar mascarillas, pero en realidad están dañando nuestra salud. Los procesos degenerativos de nuestro cerebro se amplifican a medida que la privación de oxígeno continúa. Y no es este solamente el problema, llegando al punto de la perdida de oxigeno, las células nerviosas perdidas no se regenerarán.
El llevar mascarilla, equivale a ser anestesiado con dióxido de carbono.
No existe excepción médica para la imposición de mascarillas porque la falta de oxígeno es peligrosa para todos los cerebros. Por ello los ciudadanos tenemos el derecho a poder decidir “con mascarilla o sin mascarilla”. Y no hablemos de los adolescentes y los niños, cuyos cerebros están continuamente sedientos de oxigeno.
Restringir de oxígeno el cerebro de un niño o adolescente, de cualquier forma, no sólo es peligroso para su salud, es un acto criminal. La falta de oxígeno impide el desarrollo del cerebro y el daño no puede ser reparado.
La falta de oxígeno inducida consciente y deliberadamente es un peligro absoluto para la salud y una contraindicación médica absoluta.
Otros de los efectos negativos que se han podido observar, lo hallamos en un aumento del 50% en enfermedades de las encías y caries dental a causa de las mascarillas. Los dentistas lo llaman “síndrome de la boca enmascarada” debido a que los pacientes presenta las mismas secuelas dentales que los consumidores de metanfetaminas.
La inflamación y aumento de caries está causada por una acumulación de bacterias en un ambiente seco que es alto en CO2 y bajo en oxígeno.
El Dr. Rob Raimondi, del One Manhattan Dental en Nueva York dice: “Estamos viendo inflamación de las encías en pacientes que han estado sanos toda su vida y caries en personas que nunca las han tenido antes”.
El Dr. Marc Scalfani advierte que: “el aumento en el uso de mascarillas no sólo provoca daños en las encías y los dientes, sino que eventualmente puede conducir a un derrame cerebral y a un mayor riesgo de ataque al corazón”.
Según las opiniones de médicos y científicos independientes, cada vez es más evidente que obligar a las personas a aislarse y usar mascarillas, es perjudicial para la salud y, de hecho, cuesta vidas. El confinamiento y el uso continuado de mascarillas, no solo han dado lugar a un aumento de las tasas de estrés, depresión o insomnio, sino que el aumento de las enfermedades de las encías significa un aumento de los accidentes cerebrovasculares y los ataques cardíacos, lo que dará lugar a muertes que nunca se producirían sin el uso obligatorio de mascarillas.
En un informe del 5 de junio, la Organización Mundial de la Salud, en la página 6 de las directrices provisionales aprobadas por la OMS, puede leerse:
“En la actualidad, el uso generalizado de mascarillas por parte de personas sanas de la comunidad no está todavía respaldado por pruebas científicas directas de alta calidad y existen posibles ventajas y desventajas que deben tenerse en cuenta”.
La OMS, admite que falta información verosímil sobre el uso a gran escala de las mascarillas. El Dr. Benoit Varenne, dentista de la OMS, asegura “La probabilidad de que el covid-19 se transmita por aerosoles, micropartículas o partículas en suspensión... hoy en día, creo, es desconocida, al menos cuestionable. Esto significa que se necesita más investigación”.
Pero no es solo esto, sigamos comprobando datos con rigor científico. El biólogo francés M. Zelmat, en un demoledor artículo científico: pide que los funcionarios de la OMS y del Imperial College de Londres sean interrogados y, si es necesario, juzgados por imponer el confinamiento al mundo y añade que “el confinamiento no es una medida apropiada para el tratamiento del coronavirus”. M. Zelmat, que trabaja en el laboratorio de Biología Clínica del Hospital Center, ha publicado sus conclusiones en la revista Evidence Based Medicine, aunque también las ha presentado al British Medical Journal y está pendiente de revisión.
Según Zelmat, la tasa de mortalidad del coronavirus es incluso inferior a la de la gripe. Según la evidencia científica existente, el virus es benigno, el 99% de los pacientes se recupera y el 85% se ve afectado por una forma benigna, sin contar las formas asintomáticas, que alcanzan entre el 80 y el 85% de la población.
Zelmat recomienda que la OMS sea investigada y se someta a una reforma radical y añade:
El confinamiento es verdaderamente la estafa sanitaria del siglo XXI. En medicina, el aislamiento, la cuarentena y el confinamiento de la población general no sólo son herejías, ya que no existen en la medicina, la epidemiología, la infectología o la salud pública, sino que no se basa en ninguna prueba científica.
Los gobiernos deben escuchar a los verdaderos expertos, que anteponen la salud pública a los intereses privados, detener inmediatamente todas las medidas de confinamiento y reabrirlo todo, economía, servicios médicos hospitalarios, educación, etc., porque nada en este virus lo justifica.
Y por ultimo hablar de la unión de médicos belgas para pedir “la abolición de las mascarillas en las escuelas, tanto para los profesores como para los alumnos”. Según estos médicos han aumentado los diagnósticos de ansiedad y los problemas de sueño, los trastornos de conducta y el miedo al contagio. También han observado un aumento de la violencia doméstica, el aislamiento y las privaciones.
Según los médicos belgas, “no hay pruebas a gran escala de que el uso de mascarillas en un entorno no laboral tenga un efecto positivo en la propagación de los virus, y mucho menos en la salud en general. Tampoco existe una base jurídica para hacer cumplir esta obligación”.
Cuando dentro de unos años la demencia aumente exponencialmente, no servirá de nada decir que “no necesitábamos las mascarillas”.
En medicina, una contraindicación absoluta significa que ese medicamento, terapia, método o medida no debe utilizarse, y no se permite su uso. Para obligar a toda una población a utilizar una contraindicación médica absoluta, deben existir razones precisas y serias para hacerlo, y estas razones deben presentarse a los organismos interdisciplinarios e independientes competentes para su verificación y autorización.
Son innumerables los estudios y opiniones de médicos y científicos de todo el mundo en contra de las decisiones de muchos gobiernos, que están siendo utilizados como marionetas, para someter a los ciudadanos, antes de la llegada de la "Gran Pandemia": la falta de recursos y alimentos. Dicho esto, tenemos que suponer que las medidas tomadas “NO” son las indicadas por los expertos, éstos han sido utilizados por los políticos para conseguir sus objetivos por “mandato imperativo”.
¿Quiénes son los negacionistas? Los ciudadanos bien informados que ponen en duda al grupo de expertos “inexistente” en España. O los políticos que quieren imponer con mentiras, informes inexistentes y represión y violación de nuestros derechos.