¿Es un charlatán o es realidad?
Desde que los años 60 naciera el existencialismo con Jean-Paul Sartre a la cabeza, hemos renunciado en occidente a lo que se daba por sentado o pertenecía a nuestro ámbito sociocultural.
De repente, toda aquello que nos habían contado, lo que se llamaron a partir de entonces las viejas creencias, las costumbres y los hábitos, se pusieron todas en crisis. Esto quiere decir que se tuvieron que replantear todas.
Otra característica del replanteamiento que se sugiere a partir de ese movimiento es que lo tiene que hacer uno solo. Se trata de algo parecido a un renacimiento, pero en el siglo XX. El centro es el hombre y ahora nada de lo que me pueden contar sirve, solo aquello que yo pueda comprobar por mí mismo
Si estuviéramos hablando de una comunidad que está viviendo en una selva, a explicarle al joven que de aquello que se sabía antes o que se creía que se sabía, ya no vale y que sin ninguna arma/recurso, se lance al bosque, a la selva, a buscar esa verdad, a aprender a cazar y a hacerse un hombre.
En alguno de los casos esos jóvenes llevan buenas armas, ya que han desarrollado el espíritu crítico y tienen una base sociocultural y socioeconómica en la que pueden ampararse para saber y aprender por sí mismos.
Sin embargo abundan los que carecen de las armas y los instrumentos para adentrarse en esa nueva selva y ese requerimiento de "hazlo por ti mismo", de repente se torna un desafío brutal
Lamentablemente, en el entorno "espiritual", el nacimiento paralelo de lo que hemos llamado la "New Age", o la nueva era, viene a dotar supuestamente de recursos, conocimientos y planteamientos a estas nuevas promociones en las que podrán ampararse, pero en realidad no es así porque el joven o la nueva persona que quiere formarse, se va a encontrar probablemente falto de recursos, a no ser que pertenezca a la clase de personas que disponen de esa base como hemos dicho antes.
Voy a poner un ejemplo poco sustancial, pero que sirve pedagógicamente.
La ley del talón, "ojo por ojo y diente por diente" es una ley del antiguo testamento de la cultura católica o pre católica. Siendo un viejo conocimiento, una vieja creencia, lo vamos a desechar, aunque es cierto que los psicoanalistas han encontrado la observación de bebés que la sensación de que voy a recibir aquello que he sentido o pensado parece ya hereditario.
Pero volvamos al principio, "ojo por ojo y diente por diente" es un viejo conocimiento y por lo tanto lo aparco. Y leo en las experiencias de tipo cuántico que se sugiere que la intervención del observador cambia la realidad. Esto en realidad es una falacia porque parte de un experimento en el que, para la observación de la trayectoria del electrón, tengo que utilizar un microscopio electrónico que lanza fotones de luz que, además de como ondas se comportan como corpúsculo y por lo tanto, golpean la trayectoria del electrón y desvían la trayectoria.
No es la observación. Es el hecho de que un fotón de luz golpea el electrón, y a esto en ciencia, le llamamos observador participante, que es el que puede modificar la realidad por observación, pues ha intervenido directamente y ha sido un sujeto activo dentro de la acción observada y lógicamente quien es activo modifica o interviene.
Pero sigamos con el ejemplo y vamos a creernos, que simplemente el observador mirando modifica la realidad.
El siguiente paso de la nueva era en experiencias cuánticas es decirnos que por lo tanto si observando modificamos la realidad cualquier cosa que pensamos y hacemos crea una nueva realidad, y por lo tanto, somos responsables (sobre todo, no mencionar la palabra culpables) de todo aquello que nos ocurre porque creamos nuestra realidad en virtud de nuestra vibración.
Y entonces el ojo por ojo y diente por diente viejo que nadie sabe y que todo el mundo ha olvidado, porque es una vieja creencia (que realmente debe desecharse a mi entender), toma protagonismo en forma cuántica y nos acaban de colar un gol. El replanteamiento no ha servido, regresamos a la anterior creencia de premio/castigo.
Esto parece más bien obra de charlatanes que intentan conformar a la sociedad de la siguiente manera: si eres pobre, es porque has vibrado en pobreza, si estás enfermo es porque has pensado en una enfermedad, así por lo tanto no te quejes y cambia tu realidad, no salgas más a protestar ni a pedir tus derechos, para que?
Así, el desafío del existencialismo, ya olvidado por todos nosotros y la aparición de la "nueva era" y la falta de preparación de las nuevas promociones provoca la exposición de las personas a cualquier tontería, y en esta ocasión lo digo claro, a cualquier tontería.
La única forma que tenemos de construirnos a nosotros mismos, cosa que realmente parece una buena idea, es una gran preparación de las personas para poder tomar sus opciones y desarrollar su espíritu crítico para poder elegir qué quieren ser y qué quieren pensar, más allá de cualquier autoridad sea de la vieja o de la nueva era y sobre todo más allá de los charlatanes y mucho más vinculada a la realidad.