Meditación: El arte de perdonar

Perdonar se trata de un acto sanador y reconciliador que hacemos con nosotros mismos y con los demás.

La prestigiosa universidad de Harvard a través de sus investigaciones, descubrió que aquellas personas con niveles de perdón bajos, suelen padecer enfermedades mentales como la depresión o ansiedad, frente a aquellas personas con niveles de perdón altos.

Muchas personas se resisten a perdonar porque piensan que eso hace que se expongan al mismo daño de nuevo y que la otra persona debe pagar de algún modo por lo que le hizo.

Buda decía que:

Empeñarse en la ira es como aferrarse a un carbón ardiente para arrojárselo a otro, quien se quema eres tú.

Lo cierto es que perdonar es un profundo acto sanador que va mucho más allá, ya que perdonar no significa estar de acuerdo con lo que la persona nos ha hecho, sino que con el perdón somos capaces de dejar a un lado el dolor profundo que sentimos y liberarnos de esas emociones que nos producen desánimo, malestar, odio o rencor hacia esa personas que nos infringió el daño.

Nelson Mandela dijo:

Cuando atravesé la puerta de la cárcel, me di cuenta que si continuaba odiando, seguiría en la cárcel.

Perdonar es por tanto, una decisión que nos conecta con la humanidad, ya que nos hace ver que todas las personas somos igual de humanas e imperfectas, y que por tanto, todos cometemos errores, hacemos daño y sufrimos también como consecuencia de los actos de las personas que forman parte de nuestra vida.

Cuando somos capaces de observar esto, nos damos el permiso de perdonarnos a nosotros y a los demás, y entendemos que todo lo que acontece en nuestra vida, ocurrió tal y como tenía que ocurrir en ese momento, y aprendemos de esa situación para actuar de otra manera la próxima vez. Todo en la vida es un continúo aprendizaje y crecimiento personal.