Sesiones regulares de Biodanza para liberar el estrés laboral

Soy una apasionada de la Biodanza en el ámbito clínico y social, por los efectos homeostáticos o de estabilidad interna que produce la práctica de la Biodanza en las personas, tanto a nivel fisiológico como orgánico: influyendo en nuestros sistema nervioso, inmunológico y endocrino y estimulando la capacidad que tenemos los seres vivos de autorregularnos a nivel interno para que nuestro organismo funcione de forma coordinada en todas las funciones necesarias para vivir.

¿A quién va dirigido?

• A aquellas personas que quieran aumentar su autoestima y amor propio y, así, aprender a gestionar el estrés que incide en nuestra salud física y emocional: insomnio, dolores de cabeza, tensiones musculares, fallos de memoria, hipertensión arterial, agotamiento físico y emocional, falta de motivación… Ya sea causa de las propias presiones internas (auto-exigencia, perfeccionismo) o externas por razones laborales (trabajo estresante, relaciones tóxicas, especial dedicación al cuidado de las personas, o de atención al público…)
• A las que quieran dar el paso a comprometerse consigo mismas para desarrollar todas sus capacidades humanas innatas, reforzar la confianza en sí mismas y generar nuevas formas de respuesta ante los retos de la vida diaria.

¿Cómo lo hago?

A través de la Biodanza SRT, que es un sistema de integración humana que promueve el bienestar físico, emocional y mental. Utilizando las propuestas de movimiento, las músicas orgánicas cuidadosamente escogidas y la interacción con el grupo. Esta interacción con el grupo se realiza en un espacio de confianza y respeto donde poder expresar a través de nuestro cuerpo, las tensiones físicas y emocionales. Ésto nos facilita recuperar la alegría, la espontaneidad, el juego, la risa, ampliar nuestra manera de movernos en el mundo, a percibirnos de manera consciente, profundizando en el auto-conocimiento y posibilitando alinear aquello que sentimos, con lo que pensamos y con lo que hacemos, ganando seguridad y paz interna. Esto nos permite comunicarnos con más presencia, tener una relación más fluida con nosotras/os mismos y con las demás personas, tanto a nivel laboral, como familiar y personal.

Aprendemos a autorregularnos, a desacelerar, a estar más presentes y así dar respuestas más satisfactorias ante los estímulos externos que nos llegan.

Durante la sesión realizo lectura corporal de cada persona, para detectar qué necesita reforzar e ir adaptando las sesiones y los ejercicios a las necesidades individuales y del grupo. Y así, de forma progresiva, cada participante puede ir descubriendo sus capacidades innatas escondidas y afrontar de una manera más tranquila aquello que antes le restaba bienestar.

También hago un acompañamiento personal con test y/o entrevistas periódicas para hacer un seguimiento de su proceso personal.