¿Por qué enfermamos?
Nuestro organismo está compuesto de energía que vibra a un determinado nivel. Constantemente la energía circula por nuestro cuerpo, regando nuestras células, tejidos y órganos.
Nuestro cuerpo es perfecto, está diseñado para la regeneración y autosanación. Es como una "farmacia ambulante" capaz de generar casi cualquier medicamento y siempre tiende al equilibrio y al bienestar.
A lo largo de la vida se ven entorpecidos por una mala gestión personal que puede ser debida a :
Estos malos hábitos generan grandes desequilibrios energéticos en zonas específicas del cuerpo, bien por un exceso, bien por una carencia. Lo que suele ocurrir es que algunas zonas de nuestro organismo tienen más energía de la que necesitan y otras sin embargo, no reciben suficiente. Sea por exceso o por privación energética, los órganos que se gestionan a esa altura de nuestro cuerpo acaban sufriendo y enfermando.
Con Reiki tenemos la oportunidad de equilibrar nuestro sistema energético devolviéndolo a su estado natural de bienestar.