Desde siempre he compartido mi pasión por la salud natural y el bienestar, primero como usuaria y después como terapeuta. Desde mi experiencia, tomar conciencia de que somos un todo nos puede cambiar la vida para mejor.
Reflexología:
Nuestros pies y manos son espejos de nuestro organismo. Ejerciendo una presión específica sobre determinados puntos de pies y manos conseguimos actuar sobre cualquier parte del cuerpo gracias a un efecto reflejo.
En una sesión de Reflexología sólo tienes que descalzarte y relajarte. La primera sesión empieza con un historial de salud personal para ajustar los masajes a tus necesidades. Posteriormente, las sesiones empiezan con un seguimiento de los resultados obtenidos. Todas las sesiones finalizan con diez minutos de descanso que permiten integrar y asimilar los efectos benéficos del masaje.
Con la Reflexología, obtendrás una relajación profunda, reducirás el estrés, mejorarás la circulación sanguínea y linfática, reducirás el dolor, mejorarás la digestión y tendrás mejores defensas. En definitiva, recuperarás tu equilibrio interno y aumentarás tu vitalidad.
Flores de Bach:
Los remedios florales del Dr Bach son de gran ayuda para las personas que atraviesan estados emocionales difíciles, patrones de comportamiento alterados y personalidades negativas. Se pueden usar solos o conjuntamente con la Reflexología para favorecer una evolución a nivel energético que resuelva bloqueos existentes y desarrolle la capacidad de escuchar la voz interior para vivir de una manera más auténtica y feliz. Son totalmente naturales y su uso no presenta ninguna contraindicación para ninguna persona sea cual sea su edad.
Nutrición:
Somos lo que comemos. Elegir nuestros alimentos con responsabilidad, puede conducirnos por un camino vital largo y lleno de bienestar y equilibrio. Nuestra alimentación es uno de los actos más importantes que llevamos a cabo diariamente y de cómo comemos depende nuestro nivel energético, nuestra salud y nuestra capacidad de disfrutar plenamente de la vida.