Raúl Martínez estuvo varios años trabajando como ingeniero aeronáutico hasta que su hermano le introdujo en el mundo del Shiatsu, aliviándole sus problemas de asma y alergias que llevaba arrastrando desde niño.
Desde ese momento decidió cambiar el rumbo de su carrera, formarse como terapeuta de Shiatsu y dar a conocer esta técnica, cada vez más utilizada en occidente, y así poder ayudar a las personas a volver a encontrar su equilibrio natural.