Centro mi actividad profesional en dos ámbitos de trabajo dirigidos al crecimiento personal: La Terapia Gestalt y la Biodanza. En ambas disciplinas se trabaja desde la vivencia.
Como terapeuta Gestalt, acompaño-guío a la persona en el proceso de reconocer y aceptar su sentir, para desde ese punto, saber qué necesita, decidir conscientemente qué hacer con la emoción y cómo expresarla o cómo vivirla consigo mismo o con el otro.
Estoy al lado de la persona para apoyarla o confrontarla en todo este camino con el fin de evitar interrupciones en el proceso.
La vivencia que se da en cada consulta, te ayudará a que puedas “ser tú mismo”: estar aquí y ahora, estar consciente y ser responsable, es decir, estar detrás de las propias acciones y sentimientos.
Es una terapia de crecimiento personal útil en momentos vitales de indecisión o desorientación, de mayor ansiedad o desánimo, o simplemente, como herramienta de autoconocimiento.
Como monitora de Biodanza, trabajo a nivel grupal , realizando propuestas de movimiento que voy mostrando. Cada persona las realizará adaptándolas a su propio sentir o estar en aquel instante en que se le proponen. Empiezo la sesión con una ronda inicial de todo el grupo.Continúo con propuestas de ejercicios a nivel individual, en parejas o de todo el grupo.
La sesión la creo mediante una curva que pasa por ejercicios que favorecen la expresión hacia afuera a ejercicios que facilitan una conexión con nuestro interior y con el universo. Esta curva tiene que ser lo máximo orgánica posible, pasando de ejercicios de activación que facilitan la creatividad y vitalidad a movimientos que facilitan la fluidez y suavidad, para acabar con algún ejercicio que nos ayuda a volver a activarnos.
Tendremos como elemento central la música que nos acompañará todo el tiempo e imprescindible e insustituible, nuestra propia vivencia.