Recomendaciones a seguir si tienes un niño con piel atópica
Hidratación constante: la clave.
La dermatitis atópica hace que la piel de nuestro niño sufra lesiones, literalmente se rompa, si sucede esto surgen otra serie de problemas que pueden llegar a ser muy graves, como heridas y posible infecciones que habría que tratar con antibióticos.
Para no llegar a estos extremos contamos con una gran aliada: la hidratación externa, lo ideal sería que la piel de nuestro niño, estuviese tan sana que no necesitará hidratación externa, pero esto con las agresiones que sufrimos, sobre todo en las ciudades, es utópico: contaminación aire, los componentes agresivos que hay en el agua, la sequedad en el ambiente, la poca calidad en los tejidos…
Con lo cual hay que mantener constantemente la piel de nuestro niño hidratada, y por exagerado que parezca, en momentos de crisis, esto puede suponer hidratar al niño más de tres veces al día, de hecho lo que sea necesario.
¿Qué crema utilizar? La que le venga bien a nuestro niño, que no tiene porque ser la más cara, si es posible, combinar con cremas emolientes.
En los casos extremos que no podamos poner crema al niño, porque no le guste, le moleste…nos ayudaremos del baño, y en el agua al final pondremos unas gotitas de aceite de almendras dulces, pero sólo en casos extremos. Diariamente tendremos que poner crema, en el cambio de pañal, con el masaje, cantando, jugando, como sea.
Resumen: todos los días aunque no bañemos a nuestro niño tenemos que darle un baño de crema.
Alimentación: hidratar desde dentro
Siempre cuidamos la alimentación de nuestro niño, pero en caso de niños atópicos es una necesidad vital hidratar desde dentro.
¿Cómo? Desde el nacimiento, si es posible el pecho, está demostrado que la lactancia materna es el mejor aliado para luchar contra la dermatitis, pero si has dejado de dar el pecho o nunca lo has hecho no te preocupes cuida la alimentación del niño:
Nada de azúcar añadido, ojo con los zumos, sin azúcar, nada de sal hasta más allá del año, y a partir del año con mucha moderación, que los niños coman con agua (el agua al final de la comida), de hecho que beban todo el agua que quieran, ellos saben lo que necesitan y aunque hay veces que parecen que no tienen fin es lo que necesitan, fruta diaria, incluir la fruta en su dieta, y no en forma de zumos si no entera, en caso de tomar zumos batir la fruta, no exprimir, verdura, todos los días.
Resumen: todo el agua que quieran, no sal, no azúcar, fruta y verdura todos los días
Cuidado con el baño
No sabemos por qué, pero hay en muchos sectores que se mantiene la necesidad de bañar a los niños, incluso a los bebés, todos los días ¿Por qué? ¿Que necesidad hay de bañar a un niño diariamente, e incluso lavarle el pelo si no están sucios? Modas, no hay otra explicación.
¿Qué olor es más maravilloso en el mundo que el olor de nuestro propio bebé, único e irrepetible?, no dejemos que el marketing nos haga creer que el olor de niño es algo creado en un laboratorio, y que ponen junto con alcohol en frascos, toallitas, cremas…
No será hasta la adolescencia cuando el olor de los niños sea un posible problema.
Además en el caso de niños atópicos el baño es un enemigo, el agua de nuestras ciudades contienen agentes externos, como el cloro, que no es otra cosa que lejía, que dañan la delicada piel de nuestro niño, en el caso de los atópicos extra delicada, y con lo que cuesta mantener la piel sana, y con una hidratación adecuada, si lo bañamos y además con agua caliente, jabones e incluso esponjas estaremos contribuyendo a dañarla aún más.
Pero, ¿qué hacer cuando realmente hay necesidad?, cómo en el caso de lactantes, que muchas veces las caquitas son tan líquidas que no hay otra opción, o en momentos de retirada de pañal, o de comer solos, o porque como padres nos parece lo adecuado un baño diario,... pues seguir las siguientes normas, si y decimos NORMAS, porque es indispensables cumplirlas:
- el agua tibia, no caliente, no queremos exfoliar la piel del niño, sino todo lo contrario protegerla
- incluir una gotitas de aceite en el agua, a ser posible de almendra dulce
- no alargar el baño, máximo 5 minutos, si no ablandaríamos la piel en exceso y a la hora de secar, nos llevaríamos literalmente la piel del niño en el secado
- si es posible ducha, no baño
- no utilizar jabón, y si lo utilizamos, sin olor, y si es posible sin jabón, si existen, limpian pero no queman la piel, (algunos padres nos han dicho que el jabón casero, o si no es posible, el que denominamos lagarto, da muy buen resultado)
- comprar un filtro para el grifo, no son muy caros y ayudan a eliminar, cloro, minerales nocivos como la cal
- secar dando golpes, nunca frotando
- hidratar tras el baño, es más importante que el baño
- nunca poner colonia en la piel de los niños, NUNCA, ayudaríamos a romper su delicada piel con el alcohol, y siempre llevan alcohol, si decidimos hacerlo, que viva ante todo la libertad, en los tejidos, pero no en la piel, y menos aún en su cabecita.
Resumen: no bañar todos los días, y si decidimos hacerlo tomar precauciones.
Piscina: no gracias
No porque la natación o incluso la matronatación, no sean beneficiosas, sino porque el agua de las piscinas llevan agentes externos altamente agresivos para la piel, cloro, hay piscinas que se mantienen con sal, genial, pero si no es el caso, habrá que esperar o bien el río o el mar.
Si has decidido llevar al niño a natación, antes de la clase hidrata bien su piel para que sirva de barrera, después una buena ducha con agua templada y jabón suave, y mayor hidratación de lo habitual.
Ropita: tejidos y mantenimiento
Nuestros niños deberán usar sólo tejidos naturales, algodón, lino, bambú ( si venden ropa confeccionada con bambú y no es cara),¿ por qué? para ayudar a la piel a estar sana, realizando su labor natural de transpiración, cosa que el plástico, ( poliéster) no permite.
Otro factor muy importante es cómo lavar la ropa, no con los habituales detergentes superabrasivos, no con quitamanchas, no con suavizantes, si al jabón natural, si es posible jabón de lagarto, también venden jabón especial para bebés, pero contienen también productos que pueden afectar a la piel, más en momentos de crisis, pero en menor medida.
Colonias y productos de aseo
Podemos gastarnos mucho dinero en productos, que son especiales para pieles atópicas, pero realmente no aportan ninguna novedad, salvo que no deben contener alcohol, ni jabón, ni agentes abrasivos, lo mejor, jabones con ph neutro, y usarlos lo menos posible.
Colonias, como ya comente en el apartado baño, prohibidas en la piel, si queremos usarlas en la ropa. ( contienen alcohol y por lo tanto secan la piel del niño), ojo tampoco en la cabeza.
Sol
En este caso, la recomendación es la común a cualquier niño menor de 5 años, no exponer al sol directamente, y si es necesario o así lo decidimos, cubrir las partes más delicadas, cabeza, siempre con gorras o sombreros, (ojo con la parte de la nuca), y camisetas especiales para el agua y sol, (no valen las camisetas de algodón deben ser tejidos que filtran los rayos del sol nocivos).
Esto en el caso de las horas centrales del día, en las horas beneficiosas, hasta las 11 de la mañana y a partir de las 6 de la tarde, la recomendación es exponer la piel del niño, con la debida protección, y en este caso si que tenemos que usar cremas solares buenas, si de farmacia, no marcas blancas de grandes almacenes por mucho que nos digan otros papas que funcionan.
Caricias y masajes
Debido a la dermatitis, vamos a tener que aplicar crema diariamente a nuestro niño, cosa que la mayoría de las veces no les gusta, por no decir odian, sobre todo los más pequeños, pero lo que si les encanta es pasar tiempo con nosotros. Siempre que podamos tenemos que aprovechar esta situación para estrechar aún más los lazos con nuestro niño, fuera ropa y a acariciar la piel de nuestro niño, eso si con crema, pero como un juego, podemos jugar a los masajes, seguro que estará encantado de ponernos crema y jugar con los botes.
Además está demostrado, que el contacto piel con piel es altamente beneficioso para la curación.
Y para finalizar... nos vamos a la playa
La buena noticia, es que contamos con un súper aliado para la piel de nuestro niño, el mar, la mala es que vivimos un poco alejados de él, pero hay que hacer un esfuerzo, merece la pena.
Esta altamente demostrado que la combinación de sol, agua, arena, brisa, ayuda a curar la piel de nuestro niño, lo ideal es que pudieseis estar al menos 15 días en la playa, pero lo importante es que podías llevarlo.
Si seguís con el tratamiento de Homeopatía y además podéis ir a la playa a dar a vuestro niño baño de sol y agua, el resto del año notaréis un gran cambio, y lo bueno es que nuestra piel tiene memoria, para lo malo, pero también para lo bueno.
Ya a nivel personal, os puedo recomendar productos específicos para la piel tanto cremas hidratantes, como solares, jabones…