¿Qué comer para ser feliz?
El presente artículo trata sobre el Feng Shui en relación a los alimentos y sobre cómo podemos “potenciarnos” desde el interior.
Aplicándolo desde nuestro entorno más cercano, el Feng Shui de casa va a determinar dónde tenemos carencias en diferentes aspectos de nuestra vida.
Como sabemos, el Feng Shui es un arte oriental que equilibra nuestro entorno para que la energía o “Chi” fluya correctamente, y lo hace desde la parte exterior, pero también lo hace desde nuestro interior, es una relación recíproca, es un “todo”.
Tomar los alimentos que caracterizan nuestras carencias en nuestro “exterior” también nos ayuda a potenciar esa “zona o aspecto” de nuestra vida..., y de eso se trata, mediante el estudio de nuestro entorno llegar a saber cómo nutrirnos para equilibrar nuestra vida, utilizando la herramienta del Feng Shui. A ver, para que nos entendamos, si me falta pareja, amor, o tengo una mala relación con mi parte femenina o madre, me faltaría nutrirme con el elemento tierra.
El mapa bagua o pakua
Es importante primero conocer nuestro exterior: hay varias escuelas de Feng Shui, pero para hacerlo más simple y manejable, podemos emperzar aplicando el Feng Shui occidental, que se basa en el mapa bagua o pakua, a partir de ahí conocemos que es lo que deberíamos potenciar, equilibrar, e incluso añadir.
Lo más importante de todo, es que nuestra vivienda o local sea totalmente rectangular o cuadrada a nivel de planos en planta, si no es así, os recomiendo hacer un estudio con un profesional, consultar alguna web o tutorial, para poder poner las "curas" necesarias, aunque para hacernos una idea éste, puede ser útil.
Una vez tenemos el plano de casa en planta y ubicadas cada una de las zonas o palacios, podremos comprobar dónde tenemos carencias en nuestra vida, dónde tenemos nuestros puntos débiles o bloqueos, y es ahí a donde vamos.
Los alimentos y Feng Shui
Hasta ahora se ha aplicado el Feng Shui desde el entorno, pero hay que aplicarlo también desde nuestro interior, pero ¿cómo?, pues mediante nuestro combustible, los alimentos.
La base es sencilla, a cada zona o "aspecto de nuestra vida" le corresponde un elemento, sea, metal, madera, fuego, tierra o aire (como podéis ver en el mapa bagua), en el caso de que una de las zonas esté afectada por un baño, haya un faltante o tenemos un bloqueo (cuarto de los trastos... por ejemplo), en ese lugar tenemos una carencia nutricional, por ejemplo, si tenemos un faltante en profesión (agua), además de potenciarlo con el Feng Shui externo, deberíamos añadir más elemento agua en nuestra dieta (pescados, algas...).
Alimentos más Ying, y cocinados más lentamente, para potenciar la "zona" y nuestro interior, de esta manera exterior plus interior refuerzan nuestro Chi o energía vital, y ayudan a que todo se equilibre recíprocamente.
Más adelante explicaré el listado de alimentos, los elementos que les corresponden y las maneras de cocción.
Recomiendo leer el "Libro de las mutaciones. I Ching" (Hexagrama 27, el alimento).