Psico-fisiología en Medicina Tradicional China
La Teoría de los órganos ZANG-FU de la Medicina Tradicional China nos habla de 5 órganos principales en el organismo humano: Corazón, Hígado, Pulmón, Bazo y Riñón, los cuales están vinculados a 5 vísceras: Intestino delgado, Vesícula biliar, Intestino grueso, Estómago y Vejiga, cuya disfunción viene a resultar en diversas enfermedades y trastornos de la salud.
Según la MTC estos órganos principales están también relacionados con diversos aspectos o esferas de nuestra psicología, en concreto 5 cualidades psíquicas o "almas" y 5 emociones, que pueden afectar también al correcto funcionamiento de los órganos. Es en este terreno donde vamos a centrar nuestra exposición, aportando conocimientos e ideas prácticas que nos ayuden a comprender mejor nuestra propia psiquis y a desenvolvernos de forma positiva en nuestro diario vivir.
Queremos aclarar que ambos elementos, el órgano físico y su aspecto psíquico al cual está vinculado "resuenan" de tal manera, influyéndose mutuamente, que los desórdenes de una parte afectan a la otra, en ambos sentidos, pudiendo desembocar en trastornos o enfermedades ya sea de tipo físico o psíquico. Es decir, no solo una preocupación excesiva, por ejemplo, puede acabar dañando el sistema bazo- estómago, y provocar una gastritis, sino que una alteración de estos órganos físicos puede producir que nuestra mente tenga más tendencia a la preocupación o el pensamiento obsesivo...
El pulmón
Los Pulmones son los órganos encargados de la respiración y, en ese flujo y reflujo de la energía de Vida, cumplen la importante labor de extraer el oxígeno y el Qi contenido en él, para pasarlo a la sangre, y por otra parte expulsar el Qi impuro, el CO² resultante con la expiración.
El Pulmón está, según la MTC, asociado al "Po". El Po es el "alma defensiva", e instintiva, ese aspecto de nuestra conciencia que nos permite reaccionar y defendernos ante situaciones externas difíciles y agresiones, desencadenando los automatismos reflejos.
Es necesario comprender bien lo que es saber defenderse.
Las personas no utilizamos el Po más que en su aspecto instintivo inferior, para reaccionar de forma mecánica o instintiva ante un peligro inminente, ya sea huyendo, corriendo, reaccionando violentamente, o usando nuestras fuerzas para pelear, etc., o con reacciones mecánicas e inconscientes de la mente, según diversos patrones psíquicos grabados o programados en el Subconciente, ante las dificultades, adversidades y situaciones conflictivas de la vida.
Defendernos pero de manera consciente
Pero lo interesante es utilizar el Po de forma Consciente, de instante en instante, para defendernos sabiamente, tanto de los problemas y eventos externos de la vida, como de los estados interiores negativos producidos por nuestros patrones psicológicos erróneos, y que nos agreden desde adentro, ya que todo pensamiento y emoción negativos o erróneos repercuten de forma perjudicial en nuestro organismo.
La mayoría de las personas actualmente no utilizamos el Po, repetimos, más que en su aspecto inferior, y por ello lo tenemos atrofiado, adormecido, porque todo órgano que no se utiliza se atrofia.
Entonces, gracias a esa parte de la Conciencia que es el Po en su aspecto superior, podemos defendernos sabiamente ante las situaciones externas difíciles, y también de los estados interiores negativos y perjudiciales, pero hay que saber lo que significa defenderse sabia y correctamente: para ello hay que conservar siempre la serenidad, y permanecer en una actitud de constante auto-observación psicológica de nuestros pensamientos, sentimientos y estados internos, acompañado de un Recuerdo Consciente de Sí mismos, para que el "Shen" de nuestro Corazón (el Espíritu), nos pueda irradiar todo su Amor y Sabiduría necesarios para transformar adecuadamente todas las impresiones que nos llegan y nos afectan, entonces seguro que haremos lo más correcto, lo mejor para nosotros y para todos.
Esta constante transformación de las Impresiones realizada por el "Po", la conciencia activa, atenta y en Recuerdo del Shen o Espíritu (el Ser ), es la clave no solo para impedir el torpe manejo, por parte de nuestros errores o defectos psicológicos, de los cinco "cilindros" de la "máquina humana" (intelecto, emoción, instintos, movimiento y sexo), con sus nefastas repercusiones sobre nuestra salud psico-física, sino también para no crear nuevos patrones psicológicos erróneos, resultantes de la no transformación adecuada de las impresiones que llegan a la mente.
Como ejemplos prácticos para ilustrar esta cuestión, podemos citar:
- Si alguien no sabe defenderse correctamente ante una botella de licor, acaba borracho.
- Si alguien no sabe defenderse ante un insultador, acaba insultando o incluso peleando.
- Si alguien no sabe defenderse de la codicia, acaba esclavizado por el deseo de tener más y más.
- Si no sabemos defendernos de la preocupación, nuestro bazo se debilita.
- Si no sabemos defendernos para no tener miedo, nuestros riñones se verán perjudicados, etc.
Así pues, si no sabemos utilizar el Po, si no sabemos defendernos con sabiduría y comprensión para que no prospere en nosotros cualquier tipo de sentimiento negativo, nuestra salud física y psíquica se verá resentida.
La Emoción asociada a los Pulmones es la Tristeza. Los Pulmones controlan la Energía Vital, la Energía Respiratoria (Zhong Qi) y la Energía Defensiva o sistema inmunológico (Wei Qi). La Tristeza debilita los Pulmones y disuelve la energía, por ello cuando estamos muy tristes nos sentimos débiles y sin fuerzas.
La tristeza y la depresión prolongados acaban afectando a los pulmones y pueden causar toda clase de trastornos respiratorios y debilidad del sistema inmunológico (por ejemplo, asma, disnea, alergias respiratorias, resfriados frecuentes, bronquitis crónica, etc.), e incluso problemas dérmicos (urticarias y eccemas alérgicos, etc.) ya que "la piel es dominio del Pulmón", según la MTC (recordemos que ante agresiones ya sea climáticas o emocionales la piel y el vello se erizan, se nos pone la piel de gallina...)
La filosofía Taoísta, ancestralmente vinculada a la Medicina China, nos ilustra en este sentido:
La mente se desespera por fijar el río en un lugar: poseída por las ideas del pasado, preocupada por las imágenes del futuro, pasa por alto la simple verdad del momento. Quien pueda disolver su mente, descubrirá de repente el Tao a sus pies y tendrá la claridad a mano.