Un buen tema Javier.
Estoy con Sergio en
Si te permites experimentar con tus creencias y con tu propia experiencia de vida
.
Para mi lo espiritual me acompaña siempre, en todo lo que hago, ya que mis creencias van conmigo. Creo que indignarse por la injusticia o el maltrato es tan espiritual como meditar, porque ambas cosas las siento con toda mi aprobación. Y como dice Sergio mi mente científica la siento muy espiritual, porque la hago partícipe en mis creencias.
Recuerdo una vez que una paciente que se consideraba muy espiritual, pero solo se sentía así en momentos de meditación y se sentía mal cuando iba a una discoteca, le pregunté ¿porque piensas que al espíritu no le gusta bailar o divertirse?
Vengo de la medicina y me enseñaron como si el cuerpo fuera un ente separado de lo mental, emocional o espiritual, ahora lo integro como un todo, es mi filosofía de trabajo y también de vida, así que procuro sentirme espiritual todo el día, porque ya es algo indivisible para mi.