Ambas dudas se responden solas, pero por si no seguimos el mismo proceso de pensamiento, Olga, te comparto el mío.
El currículum oculto se desmonta haciéndolo evidente y discutiendo incluso al que se intenta poner de mi parte. No puedo evitar que captes lo que me gusta y lo que no, ni que intentes encajar a toda costa (ya sabrás del concepto de deseabilidad social), pero sí puedo evitar que te intentes mimetizar conmigo al bulto y sin saber ni lo que estás tratando de asumir ni lo que ello implica. Te cuestionaré, y si no me presentas razones firmes para defender una postura o argumento, me da igual la posición que tomes, porque te dejaré en evidencia y en entredicho. Eso, o te haré el vacío. Como se le hace al eco cuando ya no te divierte oír tu voz reflejada.
A mis hijos no les podría hacer el vacío, pero sí les puedo tratar igual para todo lo demás. Se les puede enseñar a observar todas las partes antes de posicionarse.
En cuanto al segundo post: no va de un libro, sino de uno de los textos semanales de Reverte. Y sin leerlo no conviene hacer asunciones. No sabes ni lo que propone ni lo que defiende, y caes en un error de bulto frecuente en la actualidad: juzgar los contenidos por los títulos. Título que además aquí sale incompleto.
Te ahorro algo la lectura: Reverte critica la hipocresía de juzgar hechos históricos con los cánones morales actuales, a raíz de una pregunta en un libro de texto sobre si se puede considerar intolerantes a Fernando e Isabel por expulsar de España a los moriscos y los sefardíes. A esto, además de currículum oculto, se le llama pensamiento inducido.
También habla, en un curioso giro, de cómo ninguna figura de autoridad se pudo permitir la tolerancia como la conocemos ahora por razones obvias, que él explica sobradamente bien. Deberías leerle.
Sobre tu última afirmación, te diré lo que a todos: si el niño es consciente de la educación que recibe y la escoge voluntariamente, cuenta con mi favor. No estoy con los que bautizan a un bebé antes siquiera de ponerle nombre, solamente porque ellos profesan tal o cual fe. Ni tampoco por los que hablan de educación religiosa como "mi hijo solamente conoce mi religión porque es la buena, y es la suya también".
Y te lo digo como católico no practicante que se ha educado en un colegio dedicado a Rufino Blanco, pedagogo y religioso, y por ende, con presencia del catolicismo en las aulas.
