A modo personal diré que creo que lo mejor que me enseñaron fue la forma de aprender, aprendí a aprender.
La motivación para un niño de corta edad en su aprendizaje diario es el pilar base para fomentar su potencial a largo plazo.
Esta vida es un constante aprendizaje, por lo que dependiendo del recuerdo y las memorias neuronales adquiridas, ese aprendizaje constante será mayor o menor productivo a la hora de su ejecución.
Cuando somos niños nuestra más importante motivación es divertirnos, jugar y pasarlo bien. La distracción es constante sino aprendemos a enfocar nuestra atención en algo que no sea de nuestra satisfacción.
Se necesita aprender a aprender. Hace poco que comprendí la importancia de ello y descubrí que lo llevaba haciendo desde siempre pues recibi el mejor regalo que mi madre pudo hacerme. Me enseño a aprender.
En mi articulo
La mejor lección para un hijo; Aprender a aprender trato de exponer cual es mi racionamiento sobre ello y la importancia que creo debe tener en la educación de un niño en enseñarle a disfrutar aprendiendo todas esas materias que son importantes para su realización como persona productiva.