Hola Susana, yo tenía unos 9 años cuando sucedió el drama, me acuerdo perfectamente de verlo, muy asustada, en la tele. Yo no había probado el aceite de colza antes, pues, como tú, me evocaba la desgracia que sucedió. Pero ahora vivo en Francia y una dietista me lo recomendó, como la cosa más normal (pues ella es más joven y no conocía lo que pasó aquí con este aceite), para compensar con el Omega 3 que contiene, los Omega 6 que me aporta el aceite de oliva que consumo habitualmente. A mí me gusta informarme, así que investigué y escribí el artículo que adjunté al principio. He incluido este aceite en mi dieta y de momento me siento bastante bien. Aquí es habitual encontrarlo en las tiendas de productos saludables. Creo que vale la pena, por lo menos, conocer el producto, pues es una lástima perderse una opción que, antes de la tragedia, era habitual aquí también.
Gracias por tu comentario, un saludo.