Tras una ruptura amorosa aparecen muchos sentimientos muy intensos, generalmente de dolor, de tristeza, de rabia, de abandono...
A veces resultan realmente difíciles de soportar; parece que el mundo se nos viene encima;podemos llegar incluso a sentirnos deprimidos y con ideas de muerte.
Existen tres posibles reacciones ante esta situación:
-Intentar distraernos al máximo para creernos que no ha pasado nada y que cuanto antes olvidemos mejor.Esto no funciona: un sentimiento que se reprime es un sentimiento que va cobrando fuerza y que inconscientemente nos va a controlar la vida y las nuevas relaciones.
-Quedarnos anclados en el bajón de ánimo y permitir que nuestra vida vaya en picado hacia abajo.¿Alguien cree que ésta es la mejor solución?
-O interpretar lo que ha pasado como una oportunidad de aprendizaje que la vida nos ha puesto delante, y que si sabemos aprovecharla nos va a aportar elementos muy valiosos para evolucionar como personas y mejorar a nivel individual y de nuestras relaciones futuras.
El Reiki acompañado del análisis psicológico es una herramienta valiosísima para ayudar en ese proceso. !Os lo recomiendo¡
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