Te comparto un texto donde lo explica porque es complejo de explicar, pero una vez que lo practicas es sencillo.
Si uno ha definido el problema entonces en lugar de verificar la intensidad del problema antes y después lo más adecuado es fijar una señal orgánica para la finalización del tiempo de la sesión. Entonces uno establece que un escalofrío, o una punzada en el plexo solar, o una comezón o una sensación de calor u hormigueo sean la forma que el alma dice que ya fue suficiente por el día de hoy. Y de esa manera puede hacerlo continuamente el tiempo que haga falta. Hay que estar muy atentos a todo lo que vaya saliendo, porque son cosas asociadas.
Dicen los Kahuna que el Unihipili toma los pensamientos y los eventos y los junta según su similaridad, en la forma en la que se ven los cocos en los racimos que cuelgan de las palmeras como uvas en sus racimos.
Cuando uno trabaja trae los racimos dañados; pero no puede arrojar el racimo entero, el Unihipili no permite eso, así que hay que ir arrancando uva por uva hasta dejarlo limpio. El problema es que a veces ocurre que una uva va a dar a un racimo que no le corresponde y eso atormenta al Unihipili, el racimo vaciado no se limpia hasta que la última uva se haya arrancado y esto se dificulta si la uva no está en el racimo. Por eso la limpieza de algo puede conectar con muchos otros temas que en un primer momento parezcan no tener mucho que ver con el tema central que se está trabajando y deban ser limpiados también.
Es interesante cuando trabajemos con esta técnica pactar un tiempo requerido por sesión, y un número de sesiones requeridas, para que él sienta y se convenza de que toda culpa ha sido limpiada.
Autor: Khaishvara Satyam
1. Para los kahuna: la mente conciente la llaman UHANE, “yo-medio” o mente consciente. Esta parte está consciente de su propia existencia y tiene la habilidad de razonar. Tiene además la particularidad del libre albedrío (libre voluntad) para obrar según le plazca, junto al yo subconsciente.
2. La mente subconsciente es llamada por los kahuna: UNIHIPILI, “yo bajo” o mente subconsciente. Esa es la parte del ser que exterioriza la materia inconsciente y la presenta a la mente consciente para que ésta razone o decida a favor o en contra de ésta. Este Uhane es el almacén de memoria o todos los recuerdos y de las emociones. Cuando los Kahuna se refieren a este “yo” como “bajo” lo hacen para marcar su ubicación física y de ningún modo para denigrar o descalificar, en este caso el yo bajo se encuentra localizado en el plexo solar y casi nunca en la cabeza.
3. El tercero, es el "Yo superior" o supraconsciente, llamado por ellos AUMAKUA. Ese es el más antiguo y totalmente confiable “yo” que posee naturaleza espiritual; éste vive en los planos superiores de la conciencia y fuera del cuerpo físico. Nunca interviene en asuntos terrenales a menos que se solicite que así lo haga. Se entiende que el Yo Superior se adhiere bajo la ley cósmica, de no intervención.
Se dice que el AUMAKUA tiene una misión más sutil y elevada que los Yo medio e inferior. Es la parte que sueña, tiene intuiciones y premoniciones, y las manifiesta a través del Yo subconsciente. La creencia enseñada por los kahuna es que el Yo superior es el que construye el futuro hilando a través de los pensamientos, esperanzas y miedos producidos por el Yo medio e inferior.
El Yo superior es capaz, según dicen, de prever el futuro tan lejos como sus pensamientos ser logren cristalizar. Pero como los pensamientos en el Yo medio e inferior de cada persona cambian a diario, del mismo modo el futuro cambia a diario también. Es por lo que los kahuna enseñan que la comunicación con el Yo superior ocurre con la mayor naturalidad a la hora del sueño, cuando dormimos. Es en esos instantes de contacto divino que los pensamientos del día son canalizados y utilizados, a través de algún mecanismo misterioso, y puestos en marcha para crear las condiciones de su materialización en el futuro.
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Esta técnica la usan mucho en hoponopono entre otras terapias energéticas.
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Espero que mas o menos quede explicado.