Hola a tod@s. Desde mi punto de vista, me resulta imposible separar la terapia de tipo mental o emocional de la energética. La mente, las emociones, los pensamientos... son energía y tienen repercusiones que sentimos en nuestro cuerpo y en nuestras vísceras. Cuando tenemos miedo y se nos cierra la boca del estómago, nos tiemblan las piernas, el corazón se acelera... es el resultado del impacto de una emoción que mueve todo lo demás, hasta sentirlo en el cuerpo. Pero no deja de ser una energía que se mueve y notamos (quien dice que no siente la energía pero luego sí que siente su impacto en el cuerpo es porque separa los conceptos, pero eso ya es sentir la energía y es una gran guía en la terapia). En la energética también existen las cristalizaciones mentales, por ejemplo, que quedan en el campo energético de la persona debido a la mente y se trabajan desde la energética.
También es normal, al menos a mí me pasa, que cuando hago Reiki a una persona o hablo con ella en la consulta, siento aspectos mentales y emocionales suyos que le afectan en la situación que está viviendo. Es un acceso a una información que está en su campo energético, que es de tipo mental o emocional, y es importante tomarla en cuenta.
Por lo tanto, sobre todo si hablamos de terapias holísticas, se debe contemplar todo de una manera integrativa y no separativa para mejores resultados.
No es una novedad, gran parte de los terapeutas que conozco integran estas dos ramas y, en mi opinión, está geniall! el trabajo es mucho más completo y da mejores resultados.