Cada parte de nuestro cuerpo necesita para su funcionamiento correcto vibrar a una frecuencia determinada, esta frecuencia nos la dan los colores, pero éstos nos dan mucho más. Interactuamos cada dia entre nosotros rodeándonos de color, nos vestimos eligiendo el color que más nos llama la atención ese día etc...pero además nos influyen en nuestras emociones.
A un nivel muy holístico trabajando con ellos podemos sanar todo nuestro sistema, recuperar nuestro poder personal, nuestra autoestima y nuestra felicidad.