Quiero compartir contigo pequeños trocitos de mi, lo que aprendo, veo, escucho, y sobre todo disfruto...
Siempre he sentido un gran interés, por el arte, la nutrición, por cuidar mi cuerpo...
Me encanta la fotografía, ver el mundo a través de un objetivo, reflejar la realidad, mi realidad y ayudar a través de mis imágenes, aunque sólo sea sacando una sonrisa....
Un día me di cuenta que para ofrecer, mostrar, ayudar... primero nos tenemos que ver, cuidar, conocer y sobre todo querer...
Poco a poco he ido despertando...
Me acuerdo de mi primera formación de Reiki, con Maria Cicuendez Luna, una gran maestra y amiga, que nervios, que subidón de energía, que tranquilidad... tanto es así que estuve con ella hasta el 3º nivel de Reiki.
Y en una de esas sesiones, me habló de la Reflexología, una de mis pasiones hoy en día. No dude ni un minuto en indagar y buscar que era aquello... puntos en los pies que al tocarse se reflejan en otras partes del cuerpo, consiguiendo así mantenerlo en armonía no era posible...
Pero sí, me formé con Adela Carrasco, en la Escuela internacional de Naturopatía, y a lo largo de toda la formación pude comprobar por mí misma que era posible, notaba como mi cuerpo reaccionaba a lo que le estaba ofreciendo.
Adela, me transmitió con tanto amor la Reflexología, que gracias a eso no he podido dejarla de lado, al revés he seguido formándome, especializándome e investigando...
Angeles Hinojosa, me adentró en el mundo de la infancia, formándome como Monitora en Reflexologia podal infantil y perteneciendo a su asociación.
Apareció en mi vida Mauricio Kruchik, quien mejor para formarme en Reflexología especializada en embarazo, parto y postparto.
Además de la Reflexología también he tenido maestros en otras artes, técnicas, como:
María Cicuéndez, mi maestra de Reiki, me mostró, a través de sus masajes y terapias, la importancia del sonido en mi vida, y me empecé a familiarizar con los cuencos tibetanos y canto de armónicos:
En la actualidad estoy formada en:
Para mí toda esta formación se complementa con el fluir de mi cuerpo, por lo que no puedo dejar de mencionar a mi gran maestra Lucia muñoz, con su Danza Oriental holística y Gypsy quien me ha enseñado a descubrir mi cuerpo, a quererlo, a sentir la belleza de mis movimiento, y sobre todo a quererme sin juicios.
Movimiento orgánico con Joaquín Benito, consciencia corporal, fluir natural.
Y como no a Lalita Devi, con sus bellos movimientos, fuerza ,sutileza y gran sabiduría.
Gracias a todos mis maestros, mis guías, mis compañeros de viaje, que han iluminado mi camino, que me están ayudando a recordar quien soy.