Te propongo un espacio para conocerte en profundidad, aceptarte y desarrollar al máximo todas tus habilidades y todo tu potencial.
El objetivo que pretendo conseguir en mi trabajo es acompañarte para que conectes con el poder que tienes dentro de tí, con tu autoestima, que entiendas tus emociones y tus experiencias, que descubras las herramientas, recursos y el potencial que posees y a partir de aquí tomes con éxito las riendas de tu vida.
Me apasiona poder acompañar a las personas a verse a sí mismas y sobre todo acompañarlas para que reconozcan todas sus cualidades, su potencial… aquella chispa vibrante que éramos en nuestra niñez y que, en general, reprimimos y olvidamos como consecuencia de la educación y los condicionamientos sociales que hemos recibido. Creo que en estos tiempos de cambio que estamos viviendo es fundamental que las personas desarrollemos plenamente lo que somos sin miedo.
La autoestima es estar conectados con nuestra propia esencia, con nuestro ser, es querernos y aceptarnos tal y como somos, reconocer que estamos dotados de todas las capacidades y recursos que necesitamos para afrontar los retos que la vida nos trae, crecer, evolucionar y crear la vida que deseamos.
Fortalecer la propia estima permite a las personas enfrentarse a la vida con mayor confianza y optimismo, y por consiguiente, alcanzar más fácilmente sus objetivos y auto-realizarse. Todos nosotros estamos dotados con la capacidad de recuperarnos y de conectarnos nuevamente con nuestra riqueza interior.
A través de este trabajo transformador, comprenderás lo que te sucede, entenderás donde se ha originado tu malestar, y obtendrás las herramientas y la conciencia necesarias para recuperar tu poder interior y vivir de forma plena y feliz.
Nuestra riqueza emocional es amplia y diversa, todas las emociones son necesarias y positivas: la rabia, el miedo, la tristeza, el amor, la alegría... todas ellas tienen una función importante en nuestra vida, aseguran nuestra supervivencia y adaptación a nuestro entorno, son nuestro "motor" interior y generan el movimiento de la vida.
El conflicto surge cuando no las gestionamos adecuadamente.
Desde pequeños aprendemos a que hay determinadas emociones que son "buenas" , porque son aceptadas por nuestros padres y nuestro entorno, y que hay otras emociones que son "malas", porque observamos como generan incomodidad o son rechazadas igualmente por nuestro entorno. De esta manera, aprendemos a expresar con más facilidad determinadas emociones, en tanto que otras, las rechazamos y no las expresamos.
Las emociones no expresadas se reprimen y producen en nuestro organismo una gran tensión energética y hormonal. Una acumulación de esta tensión es la causa de las enfermedades psicosomáticas: fobias, arrebatos de cólera inexplicables, depresiones, dolores de espalda, eccemas, ansiedad, etc.
Por lo tanto, es muy importante saber gestionar nuestras emociones adecuadamente.
A través de este trabajo de conciencia de tu mundo emocional, aprenderás a reconocer tus emociones, comprenderás su origen y significado, y aprenderás a gestionarlas adecuadamente, de forma que no limiten tu vida ni tu salud.
El autoconocimiento es la base fundamental para el cambio. Conocernos implica tomar conciencia de lo que nos sucede y para qué nos sucede y a partir de aquí tomar nuevas decisiones y acciones. Significa también reconocer todo nuestro poder y fuerza interior para asumir la dirección de nuestra propia vida.
Mi propuesta para el autoconocimiento se basa en el trabajo sobre el Guion de Vida propuesto por Eric Berne y el Análisis Transaccional. Este trabajo permite un progresivo proceso de toma de conciencia que consiste en: hacer conscientes creencias y decisiones que nos han estado limitando, revisar los significados otorgados a las circunstancias y personas del pasado, y del presente, tomar nuevas decisiones acerca de nosotros mismos, los otros y el mundo, asumir nuevas creencias más adultas, responsables y sanas. Todo ello es posible si hay un profundo deseo de cambio y la determinación para asumir la dirección de la propia vida.
Las sesiones son de una hora de duración. La periodicidad de las sesiones son semanales en un principio, a medida que vamos consiguiendo los objetivos deseados, las sesiones se van espaciando progresivamente a quincenales, luego cada tres semanas, etc. hasta el final del proceso.