Debemos tener voluntad para deshacernos de la vida que hemos planeado y apostar por la vida que permanece a la espera de ser elegida.
Tu vida, como la mía, es el resultado directo de elecciones conscientes u otras que ni siquiera tuviste en cuenta. Las primeras son creativas, nacen de la intuición de nuestro corazón. Yo las llamo "mis compañeras de Alma". Las segundas, son destructivas porque nos llevan a acabar viviendo la vida de otros. ¡Un insulto para nuestro auténtico yo esencial, sin duda! A éstas las llamo "decisiones en coma" porque surgen de un estado narcótico de sonambulismo.
Así que en todo momento estamos decidiendo libre o ciegamente. Aceptar o rechazar, tomar una u otra dirección en el cruce de caminos, hace la diferencia entre repetir curso de las lecciones no aprendidas del pasado o hacer uso de tu don más preciado: la voluntad de acortar la distancia entre tus sueños y su realización. No importa dónde ni cómo estés. Lo que cuenta son las pequeñas elecciones.
El primer paso es el que más suele costar y sin embargo es la lanzadera para sellar tu autoconfianza.
Si tú también deseas vivirte de otra manera de acuerdo con tu sabiduría interna, estoy aquí para ayudarte a soltar amarras.