La resiliencia - aprender a ser una persona resiliente
¿Eres una persona resiliente o te gustaría llegar a serlo? ¿Qué es la resiliencia? ¿Puedes ser una persona resiliente o tienes que aprender determinadas técnicas para serlo? ¿Estás interesado en conocer las respuestas a estas preguntas que te acabo de plantear? Pues presta atención a este post porque te las voy a contestar.
Resiliencia - definición
Hay muchas situaciones en la vida que a veces crees que te van a superar. Una ruptura traumática con tu pareja, una enfermedad o el fallecimiento inesperado de un ser que quieres con locura. Estas circunstancias a veces te ponen ante el dilema si serás capaz de superarlas o te vencerán. Pero tienes una tercera opción que es apostar por la resiliencia, convertirte en una persona resiliente.
Si vamos al diccionario de la Real Academia Española de La Lengua vemos que la resiliencia se refiere a la capacidad que tiene el hombre de asumir estas situaciones límites y sobreponerse a ellas. Pero si cogemos las definiciones que ofrecen muchos psicólogos podemos decir que gracias a la resiliencia tú puedes sobreponerte a las situaciones más duras y traumáticas que te hayan tocado experimentar. Y no sólo eso. También salir finalmente fortalecido de ese trauma y desarrollar tu máximo potencial.
Una persona resiliente no considera que existe una vida dura, sino tan sólo momentos difíciles, momentos que es capaz de superar porque tienen una actitud mucho más positiva. Son personas que a menudo te sorprenden por su buen humor y nos preguntamos a veces cómo han podido salir de esa situación tan complicada.
Cómo conseguir ser una persona resiliente
La resiliencia no es una cualidad con la que naces, no es hereditaria. Es una cualidad que tú puedes ir desarrollando a lo largo de tu vida. Sí que es cierto que una persona resiliente ha podido tener un modelo a seguir, como por ejemplo un padre o madre o un hermano mayor y se ha visto reflejado en él.
Otras, sin embargo, se han convertido en personas resilientes por sí solas. Tú puedes ser una persona resiliente con tan sólo variar ciertos hábitos diarios y ciertos pensamientos. Es decir, que una persona resiliente no nace sino que se hace. Y se hace después de haber pasados por estas situaciones difíciles, haber probado el amargo sabor del fracaso pero que nunca se ha dado por vencida. Ha sacado lo mejor de sí mismo para alejarse del borde del precipicio.
Características de las personas resilientes
- Auto conocerse. Ser consciente de todas tus cualidades y también de tus limitaciones. Es la mejor arma para convertirse en una persona resiliente. En el auto conocimiento está la base para que te traces unas metas realistas, que tengan en cuenta no tan sólo tus sueños sino los recursos que tienes a mano para conseguirlos.
- Creatividad. La persona resiliente será capaz de darle la vuelta a la tortilla. De hacer algo bonito después de pasar por una situación traumática. Tiene muchos recursos para ello.
- Confiadas en sus posibilidades y capacidades. Están convencidas de que pueden conseguir sus objetivos porque tienen mucha confianza en ellos mismos. Se plantean una meta y van a por ella sin cejar en el empeño. Pero también son capaces de reconocer que en determinados momentos, para conseguir dichos objetivos, necesitan rodearse de gente, de formar un equipo. No se encierran en ellas mismas y también son muy comunicativas.
- Constantes. A pesar de todas las dificultades que comportan determinadas situaciones traumáticas, la personas resilientes siempre van hacia adelante sin desfallecer y ven las situaciones de crisis como una oportunidad para mejorar.
- Siempre miran hacia adelante. Nunca miran al pasado. El pasado, pasado está y siempre miran el futuro con optimismo y con el objetivo de mejorar.
- Objetivos y optimistas. Estas dos cualidades también definen a la persona resiliente. Miran las circunstancias con objetividad pero siempre con una visión optimista.
- Se rodean de personas optimistas. También tienen un don que podríamos decir casi innato para rodearse de personas también optimistas que les aporten bienestar y suelen alejarse de otras con pensamientos negativos conscientes de que no les pueden aportar nada positivo.
- Favorables a los cambios. No tienen ningún miedo a hacer cambios en su vida. Lo continúan viendo como una oportunidad de mejorar.
- Tenaces. No desfallecen. Siguen y siguen luchando hasta conseguir sus objetivos. Si se les cierra una puerta son capaces de encontrar otra. Y no tardan en hacerlo.
- Con sentido del humor. Va ligado a muchos de los puntos que te acabamos de contar. Van con muy buen sentido del humor por la vida, irradiando y contagiando su buen humor y su positivismo a las personas que les rodean.
- Se apoyan en los demás. No son personas que se encierran en sí mismo. Todo lo contrario. Buscan el apoyo y los consejos de los demás conscientes de que es otra oportunidad para mejorar.
Hemos definido qué es la resiliencia. Hemos visto que la resiliencia se adquiere y hemos hecho un retrato robot de una persona resiliente.
¿Y tú? ¿Te consideras una persona resiliente?
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