Los salarios y jubilaciones mínimas aportan enfermedades
Estimados amigos, hace ya mucho tiempo que me aparté de casi todo, incluso de escribir mis experiencias e investigaciones dentro de la Medicina Alternativa, aunque siempre sigo vuestros artículos.
En esta ocasión, y debido a las nefastas publicaciones y noticias que se vienen publicando en los medios, creo que nos encontramos frente a otra de las lacras que ocasionan deficiencias orgánicas en la población, indefensa por una parte y conformista por otra.
Existen muchas aseveraciones y teorías, al respecto de la importancia que supone el estrés y algunos actos traumáticos sucedidos a lo largo de nuestra existencia (algo que se manifiesta en la Nueva Medicina Germánica), con respecto a nuestra Salud y sobre todo a deficiencias Orgánicas Crónicas.
Factores que afectan la salud y calidad de vida
En un mundo como en el que vivimos, existen varios factores de importancia que disminuyen nuestra Salud y calidad de vida, y que deben ser tenidos en cuenta:
- la polución medio ambiental,
- las industrias farmacéuticas, cosmética y alimentaria, y estoy totalmente convencido,
- la clase política.
Cuando hablamos de la proliferación de casos de corrupción política, creo que estamos hablando de los abusos de poder que desde que el mundo es mundo, se ha estado sufriendo por toda la población que desgraciadamente han tenido Gobiernos.
Asimismo, el descontento y la desconfianza de los ciudadanos, no solo, hacia la mal llamada clase política, también las propias Familias Reales, no es algo nuevo; los ciudadanos son conscientes de que los partidos y los políticos en general, están tentados por la corrupción y el fraude; de hecho, la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, advirtió de que "tres cuartas partes de los europeos siguen considerando la corrupción como un gran problema en sus sociedades" y de que los resultados de la lucha contra el fraude en la UE son "insuficientes".
Higienización democrática urgente
Todo esto pone de relieve la necesidad urgente de un proceso de higienización democrática e institucional y depuración de responsabilidades que pongan coto a la corrupción.
En España la trama Gürtel, Luis Bárcenas, los EREs falsos en Andalucía, la operación Malaya, las tramas de Palma Arena y Nóos, Pallerols y Palau de la Música en Cataluña, la familia Pujol, entre otros. Pero esto no constituye, ni mucho menos, casos puntuales. Las tramas de corrupción no han parado de crecer.
Los políticos han dejado de ser parte de “una política de ideales”, para convertirla en política de acciones de enriquecimiento personal, dicho de forma más suave, la política es una manera de vivir muy bien con bastante facilidad. La gran mayoría de los políticos tienen una muy alta moralidad, cuando se encuentran en la oposición; cuando han obtenido el poder, la pierden progresivamente.
Pero no solo es deshonesto pertenecer a una trama de corrupción, es igual de deshonesto pertenecer o ser miembro de Consejos, Comisiones Permanentes, Ponencias, y otros, que propongan y acepten salarios y jubilaciones mínimas, cuando estos "representantes del pueblo” tienen sueldos de 4.500 euros, más 1.800 euros de gastos.
Son deshonestos todos aquellos llamados políticos que reciben salarios excesivos, que viven en la ostentosidad, que pueden enviar a sus hijos a estudiar al extranjero, mientras los colegios públicos están faltos de medios, y todo ello y para más recochineo, esos salarios están pagados por aquellos que viven en casi la miseria.
Reuniones, pactos, comisiones etc., etc., posiblemente podrían evitarse simplemente con efectuar una revisión a la baja de Salarios a los Políticos. Debería hacerse una Comisión para establecer el salario mínimo y máximo de estos políticos elegidos por los ciudadanos.
Posiblemente no hablaríamos más de los problemas de nuestros jubilados y posiblemente habría menos dispuestos a adoptar la política como profesión. Quizás cuando alguien dijo: “Nadie puede adoptar la política como profesión y seguir siendo honrado”, tenía toda la razón.
Con menos dinero, la alimentación se resiente
Un salario mínimo, al igual que una jubilación mínima, trae consigo el deterioro de la Salud de las familias, pandemias como: obesidad, colesterol, presión arterial, perdida de suelo, estrés, cáncer, deficiencias cardiacas, etc.
Si estamos conformes, en que la alimentación tiene una influencia vital en nuestra Salud y nuestra calidad de vida, lógico es pensar que con un salario mínimo de 800/1000 euros o una pensión de 480/800 euros, se está consolidando la enfermedad en los ciudadanos, ya que, con estas prestaciones, solo se puede tener acceso a alimentos procesados de baja calidad nutricional.
Como se suele decir:
No pongamos al zorro a cuidar de nuestras gallinas.